Dentro de poco volveré a un rincón gallego, al norte de Cedeira.... que este verano se echa de menos, porque mientras el resto de España se ahoga de calor, allí se mantienen las caricias del mar. Una de las fotos muestra las hortensias blancas de una de las entradas a mi "pazo" (lo llamo así por la envidia del fresquito, eh), con otra ocupo el ojo de la cámara; pero la ñprimera muestra el mar de Pantín, con "la luz cuando termina".
hortensia blanca y nubes de poniente
tierras del norte con la luz vestidas
paisajes que suceden a paisajes
oreados por las lluvias que los limpian
a su término el mar siempre aparece
canción de espumas y rumor de brisas
junto al mar lo que empieza y lo que fue
intuye que no es más que travesía
caminos con parada en la belleza
ascensos sin porqué a la armonía
junto al tiempo que viene con nosotros
y no sabe tampoco lo que mira
esplendor de la senda sin destino
esplendor de la luz cuando termina
TRATADO GENERAL DE LA TERNURA, CON SU MENTA AL CABO
Tratado general de la ternura
recogido en catorce versos llanos
que enseñan a aceptar todos los gestos
que brotan al venir enamorado
de lágrimas ardientes no se trata
ni de pasión o variedad de llantos
es algo que nos da naturaleza
agua al mar luz al sol verdor al árbol
lleva su ejemplo en otros versos simples
que cuentan una historia y citan clásicos
para que no se piense que el soneto
es pensamiento baladí inventado
todos los versos se han de leer con voz
algo quebrada y con suspiro al cabo
II
He puesto menta fresca en la ventana
entre gardenias pensamientos cintas
ha sido un ramalazo de ternura
incompatible con vivir deprisa
pero nadie me ve cuando las hojas
en mis yemas los dedos las deslizan
y simulo discretamente que
aun recuerdo la voz de barbolilla
o me llevo las manos a la cara
a la antigua manera cervantina
tema del arcipreste y de azorín
"por lo perdido mano en la mejilla"
y que a nadie le asuste la ternura
ni el cariño o rendirse a las caricias
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