Decidido. Me haré un carnet de Día,
y que me den cupones de descuento;
el aceite de oliva me saldrá,
calculo, a dos noventa y seis el litro
si aprovecho la oferta “tres por dos”,
y si compro yugures que caducan
me puedo ahorrar, tirando por lo bajo,
unos cuarenta céntimos por cada
paquete de sabores desnatados,
que a la chita callando seis o siete
euros al mes ya son, lo suficiente
para hacer frente a la nueva factura
de los teléfonos, envenenada.
Informaré al decano, desde luego.
Yo
no sé si añadir un estrambote
para
explicar azares de la vida.
No
sé.
¿Y
si acabo con una palabrota?
A
ver. A ver. Alguna refinada.
La
verdad es que son vulgares todas.
Esto se alarga demasiado, creo.
Y ya no dice nada que interese;
divagaciones que no cambian mucho.
Y otra vez me he cruzado con clarita.
jajajaja simpático poema.
ResponderEliminarHay que ahorrar en todo menos en imaginación.
Bicos.