Cuaderno de pantalla que empezó a finales de marzo del año 2010, para hablar de poesía, y que luego se fue extendiendo a todo tipo de actividades y situaciones o bien conectadas (manuscritos, investigación, métrica, bibliotecas, archivos, autores...) o bien más alejadas (árboles, viajes, gentes...) Y finalmente, a todo, que para eso se crearon estos cuadernos.
Entonces, debo entender que es la última entrada?
ResponderEliminarAgradezco las fotos, los poemas, la métrica, los recorridos por Madrid, el Retiro, los atardeceres, el mar, China, el Jardín Botánico y todos los otros jardines...
Esta antigua alumna lamenta haber comentado siempre como anónima, pero el pánico escénico es así, qué le vamos a hacer!
A veces al profe, querida alumna, le hubiera gustado curiosear con quién habla; pero bueno, también eso hay que respetarlo. Todo eso que dices.... allí sigue estando, para que lo disfrutes, ojalá haya contribuido a ello.
Eliminarsin duda volveré a algunas entradas y las disfrutaré sin duda.
EliminarSiento mucho que abandones el blog, Pablo, tendrás tus motivos... pero es una pena.
ResponderEliminarCuando yo cumplí cinco años, no lo recordarás, pero me dijiste que había que seguir, que las cosas cambian, pero que con la experiencia había que seguir (o algo así). El trabajo de cinco años merece no ser abandonado...
En fin, si has decidido cambiar de "casa" espero que nos invites a ella para poder seguir leyéndote.
Saludos desde Madrid
Tu blog, Mercedes, tiene una trayectoria más sólida y firme, va por un camino en que tú eres ya autoridad; yo mismo, de vez en cuando, voy buscando noticias y referencias, o envío a la gente a que e consulte, porque sé que todo lo que dice es de primera mano. Un abrazo. Y a ver si algún día nos conocemos, me refiero a que nuestras conversaciones siempre han sido vía blog, cosa que la gente a veces no sabe, pero que dignifica mucho los temas que se tratan, ¿no?, sin interferencias de otro tipo. Un abrazo
EliminarGracias y suerte en sus nuevas andaduras. Sitio muy lejano para despedirse, es toda una despedida de las de verdad. Le deseo lo mejor y muchas fotografías, escrituras y experiencias y emociones más, exteriores e interiores. Buenos viajes hacia fuera y hacia dentro
ResponderEliminarQueridos amigos, la mayoría anónimos, queridos lectores: gracias por los comentarios. Las cosas cambian y el blog se ha hecho viejo –como yo– tras cinco años de caminata. Tuvo sus lectores, hasta 300 diarios, en algunas etapas, ahora no suele pasar de 100 y en la última semana se fue a 50. Normal. Y hay que ir aceptando todo como viene. Yo seguiré trabajando y haciendo otras cosas, sin duda, las que convengan a mis circunstancias, por ejemplo tendré un sitio anónimo en la red (recordad que la mayoría sois anónimos), para intentar huir de vanidades.
ResponderEliminar¡Muchas gracias!
He disfrutado mucho leyéndote, Pablo, primero en la biografía de Quevedo, luego aquí, con esta variedad de asuntos tan sugestiva: literatura, paisajes, arte, comida. Ahora me resultará difícil hacerlo. ¿Cómo se encuentra a un anónimo? Muchas gracias
ResponderEliminarLo haría mal si descubriera la dirección, que ha de valer por ella misma, por lo que allí se diga. Además, Concha, ya sabes que enredo en Facebook, como tú.
ResponderEliminarVoy a echar de menos las visitas a este lugar, donde siempre aprendía algo. Me gusta mucho la fotografía, que no es tanto final de trayecto como sugerencia de un camino más allá. Espero frecuentarlo también. Muchas gracias por todo, profesor.
ResponderEliminar¡Te echaré de menos! Y me alegra ver que has llegado a tu particular Ítaca.
ResponderEliminarQué pena me da dejar de leerte, Pablo. Aprendía mucho de literatura y de Madrid. Y siempre estabas dispuesto a contestar preguntas técnicas. No sé si podré abusar y preguntarte sobre algún libro que hable acerca de la literatura que se enseñó en las escuelas durante el franquismo. Además, a ver si existiera algún manual sobre qué literatura se permitió vender y cuál no. Replantéate no clausurar la bitácora. Por favor. Un abrazo.
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