Nada mejor para ilustrar dos rasgos simples que se observan en la población china actual: la capacidad para dormirse en cualquier lugar, y la invasión de los teléfonos, ya no solo como medio de comunicación oral y escrita, sino para tomar fotos, ubicarse en algún lugar, buscar otros.... En la primera de las fotos el hombre se ha dormido sobre su pareja, que sigue manteniendo activo su teléfono. Probablemente la actividad sobre estos aparatitos mágicos es un signo de civilización global, que arrasa entre los adolescentes y que les permite comunicarse con rapidez y facilidad.
I
II
La cultura electrónica es arrolladora en China, y creo que no solo la telefónica. Se trata de un modo de referirse y de hablar sobre los teléfonos, los ordenadores y otros artilugios que interesa a todo el mundo y sobre lo que todos opinan a partir de su propia experiencia. Desde los labradores que venden fruta en sus carromatos a los ejecutivos de los centros financieros, pasando por los colegiales, todos llevan como compañero inseparable uno de estos artefactos, que utilizan cada vez para más cosas. Una de mis mejores amigas chinas conocía así perfectamente el tiempo que le quedaba a mí autobús para llegar a una determinada parada, si había llovido mucho o poco en Madrid, cuál era la cotización del yuan con respecto a la libra... Pan comido para la mayoría de la gente, cuanto más joven, mejor lo saben.
Yo he hecho lo que he podido y he terminado con un Huawei,
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