Yo nunca
llevaré batín, lo juro,
un señor con
batín que se levanta;
no tendré en
las orejas del sillón
mis sueños de
vejez, con una manta,
ni miraré las
piernas de la chica
que venga a la comida y la fregada,
ni me dormiré
viendo que en la tele
la serie de las
noches se me alarga;
daré al cuerpo
lo que es del cuerpo, cierto,
y dejaremos
fuera lo del alma,
no vaya a ser
que se confunda todo
como ocurrió
a los curas de Granada;
de vez en
cuando, barbolilla en sueños,
lo mío sin
rendirme esto se acaba
Lorca |
Manuel Machado |
Creo que es "la percha" lo que hace al batín, a las bermudas, o a las polainas, más bien que no a la inversa...Con perdón de los artistas de la costura...
ResponderEliminarMe parecía muy elegante el señor Gandhi, muy inteligente en cuanto a la ropa y a la economía...
Vaya,!, y yo que te imaginaba con un batín de seda y un pañuelo blanco anudado al cuello, ah y unas zapatillas de piel de borreguillo!
ResponderEliminar:)
Bicos.
Todo un símbolo el batín... La foto de Lorca me pareció, no sé, quizá dramática, con las manos recogidas en el regazo.
ResponderEliminarHola, Ohma. Lo de las zapatillas de piel de borreguito me lo voy a pensar.