[A Sofía, que me regaló un geranio: acaba de florecer]
arreglar los geranios cuando cae
la tarde es tarea que se cumple
ahora en los balcones de mi barrio
cuando la primavera alarga sombras
tantas hojas secas dejó el invierno
tantos esquejes que no florecieron
ramas huecas vacías o rotas
que hace falta quitar para que otras puedan
elegir los colores del verano
que devuelvan al barrio la alegría
y que nos acompañen
cuando vamos
cada día a cumplir nuestras tareas
atravesando calles tiendas plazas
mirando los balcones con geranios
Obrigada, Pablo.
ResponderEliminarEstá hermosa la tímida "sardinheira" que un día te traje desde el pueblo serrano de mi abuela.
Las hortensias resisten, resisten, y ¡verdes renacen de las cenizas invernales!
Un abrazo.