esperando que
llegue la alegría
asomado al
final de lo que salga
esperando que
vengan a buscarme
y de vuelta me
lleven a mi casa
donde juegan
los otros por la tarde
y después de
jugar tanto se cansan
que se quedan
dormidos al cenar
y no pueden
ponerse ni el pijama
esperando que
llegue quien no vino
lo que a veces
de cerca sé que pasa
que ya fue
tiempo de que aquello fuera
lo que nunca
viene y siempre tarda
cerca de casi
todo cerca estuvo
ni se
aleja ni vuelve ni se marcha
Enhorabuena, Xinyan, y feliz año. Tu dominio de la forma de 14 versos es abrumador, muchas me encantan... pero yo sé que cultivas también otras, y más informes a veces. Por picarte: deléitanos. Y esa gaviota, ¿es gallega? Disfruta. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarFeliz año, Ricardo. La gaviota es de la bahía de Cádiz.
ResponderEliminar¿Cómo anda el nuevo año, para el que te deseo lo que mejor te convenga?
Este blog se va a a cerrar pronto, Ricardo, dentro de un par de meses, cuando cumpla los cinco años ininterrumpidos.... Creo que ya he cumplido con él y con lo que podía decir.