1
como tú quiero
la mujer hermosa
quiero una dama
que mi nombre escriba
y al lado de mi
nombre ponga un beso
y deje en mi
recuerdo una caricia
que si el
silencio de la noche llega
guarde mi
imagen entre sus sonrisas
que se deje
querer muy lentamente
y estremezca la
noche detenida
y me llame
cuando la luz nos llame
y recobre su piel
amanecida
con los labios
buscando las estrellas
que aun
quedaron temblando y escondidas
y que entonces
me mire y se abandone
y que en mis
manos quede así dormida.
2
Y qué estará
pasando cuando pasas
y me dejas la
estela de tus ojos
y ya no debo
confesar qué siento
y tengo que en
secreto guardar todo
lo que dicen
que ha sido la belleza
que llevas no
se sabe de qué modo
como niebla que
cerca te rodea
como magia que
crece poco a poco
y deja pecho
adentro las hogueras
pasión melancolía pena
gozo
brasas que allí
se quedan encendidas
ascuas de
corazón dentro de un pozo
y así vuelvo a
mirarte cuando pasas
y en tu hábito
de ausencia me recojo
3
Para que imaginara tu figura
cada vez que contemplo la belleza
anduvieron los sueños junto a ti
sin que nadie supiera qué los lleva,
contigo se han labrado siglo a siglo
motivos de los versos y las penas:
de tu labio hace gala el universo,
a los aires seducen tus maneras;
y ya no puedo soportar si vuelves
a ocupar el camino y la frontera,
si a tus ojos abiertos en los míos
mi pasión nuevamente se encadena,
que no saber lo que ocurre si contigo
insoportable sensación me deja.
4
para azotar tu piel tersa y desnuda,
prepárame unas flores de lavanda
y dispón que en tu cuerpo descubierto
perfumados los poros se nos abran
que cuando sube la sangre se entregue
ardiente tumultuosa y excitada
nos uniremos cuando todo sea
un desorden de pieles perfumadas
será al final del cuerpo abandonado
en galerías que pasión estalla
azucenas que tiemblan en las manos
dejarán nuestras voces desmayadas
río de sangre hacia tu cuerpo abierto
he escondido en tu sexo mis palabras