Placeta y callejón del guindo al
lado
de los Baños reales convertidos
en el Museo de Ángel Barrios nada
recuerda al
guitarrista granadino
la Calle real me ofrece un banco bajo
un castaño
suntuoso y florecido
–copos
blancos con una mota roja–
perfuma la
glicinia los caminos
plaza y
calle repletos de de turistas
pero todo
parece muy sencillo
la ciudad
que perdí antes de ser mía
pudo ser mi
ciudad y no lo ha sido
ahora al
volver recuerdo que la amaba
y siento la
nostalgia de haberme ido
No hay comentarios:
Publicar un comentario