.... Inicio con cuatro puntos suspensivos (ya expliqué que escribo cuatro por apego a César Vallejo) la entrada porque es recuperación de la que no pude terminar cuando GOOGLE me dijo que si no pagaba cinco dólares –es el mínimo–, me iba a quedar sin capacidades y sin Picasea, o algo así. Luego me comentó algo Julia desde Buenos Aires sobre esa misma cosa (y lo ejemplificó enviándome una foto tomada en París, delante del Instituto Cervantes, con motivo del congreso de la AIH, algún día contaré ese congreso), de manera que, si tengo tiempo, veré luego lo que se llama con una torcedura de Picasso; pero temo la invasión de la técnica mucho, mucho la temo, y siempre me acuerdo de la máquina de comer de Tiempos Modernos, sobre todo ahora que tengo un grano en la nariz, que exige cuidados artesanales y no industriales. Y ya sé, ya sé que no se habla de granos en público; pero la desmesura de lo privado también me asusta mucho, porque ya prácticamente no puedes hablar a nadie de nada, téngase o no se tenga intenciones aviesas. Y al fin y al cabo, según uno estudió en los años que se estudiaban estas cosas, ya se sabe, el ámbito de lo privado es el que más se desarrolla con el auge de las sociedades burguesas. En el por el contra de lo que es comunitario, vayan a la raíz.
Volvemos a Bartolomé –si pasan por Valladolid vayan a ver lo que hay allí, yo tengo pensado hacer un par de visitas a la Encarnación, las Descalzas y al Banco de España, a ver si me acompañan Gema y Diana, en donde paran varias cosas interesantes del retratista, del que doy ahora toda la referencia pictórica tras la que ando; si no la encuentro, habré de ir a Lisboa, y que Sofía me lleve a las hemerotecas, para corroborar a ciencia cierta qué pasó con esta media docena de cuadros y si la revolución de los claveles, ¡ay!, no fue como la cantaba José Afonso:
Recuerdo las personas representadas y mi interés por encontrar alguna reproducción de mejor calidad, en color a ser posible:
–El Archiduque Carlos de Austria, cuñado de Felipe III.
–La Archiduquesa María Magdalena, cuñada de Felipe III, Gran Duquesa de Toscana
–Gregoria Maximiliana, prometida de Felipe III
–La Archiduquesa Catalina Renata, cuñada de Felipe III
–La Archiduquesa María Cristina, cuñada de Felipe III, Princesa de Transilvania
–La Archiduquesa Leonor, cuñada de Felipe III
¡Muy bellas estas damas que aquí nos presenta!, de gran porte y distinción todas ellas.
ResponderEliminarEspero que por la que sufre tantos desvelos en sus versos tenga, al menos, semejante apariencia.
Aunque le aviso que nadie merece muchos desvelos ni sufrimientos, si acaso, se suele necesitar amabilidad, cariño y un buen humor, lo más difícil.
Zeca Afonso (José Afonso) fue sin duda una de las principales voces de la "blanda" revolución de los claveles y del post 25 abril... ¡Inolvidable!
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