Para cumplir mi tiempo escribo versos
artificialmente
–el arte no es natural–;
en las palabras queda la ceniza
de lo que nadie logrará decir,
la canción que un mozart inolvidable
nunca compuso, poco antes de que yo viniera seriamente
a enamorarme ayer por la mañana
un buen rato profundamente
de ti y de ti sin conocer siquiera
en qué lugar guardabas de los labios
el beso con que nunca me dejaste
dormir ni tanto ni durante nada
esta absurda semana de diciembre
No hay comentarios:
Publicar un comentario