En efecto, en ese puerto del Adriático castigado por turcos, crucial para la historia de aquellos pueblos, con una fortificación aragonesa que ocupaba medio pueblo, me encontré con una exposición temporal de Dalí –dibujos, esculturas– aprovechada para exponer arte actual, sobre todo italiano. El interior del castillo se había restaurado con la sencillez de la piedra o la blancura; el resultado en algunas salas era brillante; en otras, no tanto. En su conjunto, la exposición añadía al color del mar y del pueblo, la atrevida paleta de Dali y, de su mano, del arte actual. En las ilustraciones, varios ejemplos de Maximo Pasca.
Cuaderno de pantalla que empezó a finales de marzo del año 2010, para hablar de poesía, y que luego se fue extendiendo a todo tipo de actividades y situaciones o bien conectadas (manuscritos, investigación, métrica, bibliotecas, archivos, autores...) o bien más alejadas (árboles, viajes, gentes...) Y finalmente, a todo, que para eso se crearon estos cuadernos.
Amigos, colegas, lectores con los que comparto el cuaderno
sábado, 11 de junio de 2011
Dalí en el castillo de Ótranto
En efecto, en ese puerto del Adriático castigado por turcos, crucial para la historia de aquellos pueblos, con una fortificación aragonesa que ocupaba medio pueblo, me encontré con una exposición temporal de Dalí –dibujos, esculturas– aprovechada para exponer arte actual, sobre todo italiano. El interior del castillo se había restaurado con la sencillez de la piedra o la blancura; el resultado en algunas salas era brillante; en otras, no tanto. En su conjunto, la exposición añadía al color del mar y del pueblo, la atrevida paleta de Dali y, de su mano, del arte actual. En las ilustraciones, varios ejemplos de Maximo Pasca.
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