Cuaderno de pantalla que empezó a finales de marzo del año 2010, para hablar de poesía, y que luego se fue extendiendo a todo tipo de actividades y situaciones o bien conectadas (manuscritos, investigación, métrica, bibliotecas, archivos, autores...) o bien más alejadas (árboles, viajes, gentes...) Y finalmente, a todo, que para eso se crearon estos cuadernos.

Amigos, colegas, lectores con los que comparto el cuaderno

martes, 4 de diciembre de 2012

Crisis


Voy a cambiar a un coche más pequeño,
–madrid no es urbe para bicicletas–
y creo que daré de baja el móvil,
dejaré de comprar toda la prensa,

anularé las suscripciones, todas,
cambiaré en las bombillas la potencia,
habrá que acostumbrarse al agua fría
y a comprar en rebajas y en ofertas;

y desde luego fuera cines, bares,
salidas por la noche, cuchufletas,
conciertos y demás vicios estúpidos
que han venido amargando la existencia;

pero será lo más duro anular
del corte inglés, sin duda, la tarjeta. 






10 comentarios:

  1. Qué triste se vuelve todo, no sin Corte Inglés, si no sin cine ni bar, lo que antes era más barato para todos. Lo del Corte Inglés hace años era un poco de semi-lujo.
    Buen poema y sí, Madrid no es ni para coche ni para bici, es para ¡viva el transporte público!; a pesar de que a los madrileños no les gusta mezclarse con el común de los mortales y son muy señoritos, lo público no les gusta nada (véase a quién votan siempre). El coche es contaminante y muy caro, además de que no hace ninguna falta, hay que exigir buen transporte público barato. Gracias por sus reflexiones en verso tan interesantes.

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  2. Tampoco es recluirse que una cañita o un café no es la ruina, :)
    Me gusta el vehemente poema.
    Ehhh por cierto, qué son las cuchufletas?
    (A ver si lee los comentarios)
    Because.

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  3. Hola, comentaristas; sí que los leo, siempre, Ohma, lo que pasa es que soy muy soso para comentar luego yo también. "Cuchufletas" es una palabra un poco comodín para todo lo que sea zumbón, prescindible, etc. Está en el DRAE, y es clásica, de donde le ha debido venir al rapsoda.
    Claro, anónimo, que el trasporte público, el coche de San Fernando y la bici son los mejores medios; pero en Madrid las distancias son a veces excesivas, incluso para el trasporte público (la Universidad Autónoma de Madrid, por ejemplo, está a unos 20 kms.) Vamos por mal camino, me temo.

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  4. jaja es símpatica la palabra y es la primera vez que la leí.
    Gracias.

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  5. ¡Hala, que a la Autónoma antes se llegaba la mar de bien en tren y me imagino que ahora aún mejor con esos súper trenes que pusieron luego!

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  6. Cierto en muchos casos, en el mío primero hay que ir al metro y del metro enlazar a cercanías.... Quizá no sepas, anónimo, por lo demás, que hace falta tener un capital para esas combinaciones, por lo que ha subido el trasporte: estudiar va siendo cosa de ricos. Demasiados problemas, en algunos casos, que se enredan con otros difíciles de argüir ahora.

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  7. En eso tiene razón: estudiar, enfermar, leer, ir al cine, al bar... todo cosa de ricos, qué país más aburrido va a ser el próximo año. Seguiremos con la protesta y las reclamaciones en lo que se pueda; esperemos que el ánimo no decaiga, ahora que nos quieren tirar al suelo.

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  8. El Retiro tiene cada vez más gente, que llena su tiempo –y bien divertido– con otras muchas cosas de las que no cuestan tanto; y además hablan, pasean, hacen deporte.... Me dicen que se está recuperando la lectura entre la gente más joven. Veemos.

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  9. Siempre se puede volver al tiempo, no tan lejano, de llevar la merienda de casa y de que te dejen sentar en la terracita a disfrutarla a condición de que compres la bebida. El Retiro por sí solo ya llena el tiempo y el espacio de maravilla, con contemplarlo y respirarlo sin más uno se llena de vida. El Parque del Oeste igual, más solitario y silvestre, para recorrido largo. Gracias por las sugerencias. El saber disfrutar de la lectura te salva para toda la vida del aburrimiento: esperemos que no se carguen las bibliotecas.
    Decálogo para formar a un buen lector (uno de tantos y perdón por ocupar tanto su página):
    1. Dar ejemplo
    ...Las personas adultas somos un modelo de lectura para los niños. Leamos delante de ellos, disfrutemos leyendo.

    2. Escuchar
    En las preguntas de los niños está el camino para seguir aprendiendo. Estemos pendientes de sus dudas.

    3. Compartir
    El placer de la lectura se contagia leyendo juntos. Leamos cuentos, contemos cuentos.

    4. Proponer, no imponer
    Es mejor sugerir que imponer. Evitemos tratar la lectura como una obligación.

    5. Acompañar
    El apoyo de la familia es necesario en todas las edades. No los dejemos solos cuando aparentemente saben leer.

    6. Ser constantes
    Todos los días hay que reservar un tiempo para leer. Busquemos momentos relajados, con buena disposición para la lectura.

    7. Respetar
    Los lectores tienen derecho a elegir. Estemos pendientes de sus gustos y de cómo evolucionan.

    8. Pedir consejo
    El colegio, las bibliotecas, las librerías y sus especialistas serán excelentes aliados. Hagámosles una visita.

    9. Estimular, alentar
    Cualquier situación puede proporcionarnos motivos para llegar a los libros. Dejemos siempre libros apetecibles al alcance de los niños.

    10. Organizarse
    La desorganización puede estar reñida con la lectura. Ayudémosles a organizarse: su tiempo, su biblioteca...

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