sábado, 11 de mayo de 2013

Sorpresa




La sorpresa del último recodo
fueron tus labios que a mi cuerpo saben,
para guardar la voz te doy los versos,
para templar mi sed tu cuerpo se abre,

me entregaré al rincón de tu presencia:
en donde todo está y que nada acabe,
lejos la luz persiste fugitiva
de sueños vuelve o de los sueños nace.

Contigo puedo recobrar despacio
aquel lugar a donde van los viajes,
llevados por un tiempo melancólico
entregado por fin a los finales.

Que tu mano en mi piel venga y navegue
que todo lo demás se oculte y calle.



No hay comentarios:

Publicar un comentario